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¿Has observado alguna vez a obreros de la construcción trabajando en un edificio a distintos niveles de andamios, pasando los ladrillos del nivel inferior al andamio de arriba y de allí al siguiente? El trabajo avanza mientras cada ladrillo al llegar a un nivel es descargado y luego pasado al nivel siguiente.
¿Qué ocurriría si uno de los obreros del nivel intermedio no entregara sus ladrillos y al mismo tiempo le fuera alcanzada otra fila? ¿Qué si el hombre del nivel superior se negara a recibir su carga de ladrillos? El pobre hombre del nivel medio sería aplastado por la carga de ladrillos.
Eso es precisamente lo que nos ocurre en la esfera invisible. Cuando el primer problema nos alcanza fracasamos en no mandarlo "hacia arriba", y pronto nos sentimos presionados y oprimidos. Luego viene un segundo problema y un tercer problema y paulatinamente nos debilitamos hasta que finalmente quedamos aplastados bajo la carga.
El remedio es tan sencillo. Tan pronto como una ansiedad nos amenace debemos pasarla de inmediato "hacia arriba".
Watchman Nee
1 Pedro 5:7
echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
Mateo 11:28
Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.
Un pequeño gusanito caminaba un día en dirección al sol. Muy cerca del camino se encontraba un Chapulín:
- Hacia donde te diriges?, le preguntó.
Sin dejar de caminar, la oruga contestó:
- Tuve un sueño anoche; soñé que desde la punta de la gran montaña miraba todo el valle. Me gustó lo que vi en mi sueño y he decidido realizarlo.
Sorprendido, el chapulín dijo, mientras su amigo se alejaba:
-Debes estar loco! ¿Cómo podrías llegar hasta aquel lugar? !Tú, una simple oruga!.
Una piedra será para ti una montaña, un pequeño charco un mar y cualquier tronco una barrera infranqueable.
Pero, ... el gusanito ya estaba lejos y no lo escuchó . Sus diminutos pies no dejaron de moverse.
De pronto se oyó la voz de un Escarabajo:
-¿Hacia dónde te diriges con tanto empeño?
Sudando ya el gusanito, le dijo jadeante:
- Tuve un sueno y deseo realizarlo, subiré a esa montaña y desde ahí contemplaré todo nuestro mundo.
El escarabajo no pudo soportar la risa, soltó la carcajada y luego dijo:
- Ni yo, con patas tan grandes, intentaría una empresa tan ambiciosa.
Y se quedó en el suelo tumbado de la risa mientras la oruga continuó su camino, habiendo avanzado ya unos cuantos centímetros.
Del mismo modo, la araña, el topo, la rana y la flor aconsejaron a nuestro amigo a desistir de su sueño!
-No lo lograrás jamás! - le dijeron-, pero en su interior había un impulso que lo obligaba a seguir.
Ya agotado, sin fuerzas y a punto de morir, decidió parar a descansar y construir con su último esfuerzo un lugar donde pernoctar:
- Estaré mejor, fue lo último que dijo, y murió.
Todos los animales del valle por días fueron a mirar sus restos. Ahí estaba el animal más loco del pueblo. Había construido como su tumba un monumento a la insensatez. Ahí estaba un duro refugio, digno de uno que murió "por querer realizar un sueño irrealizable".
Una mañana en la que el sol brillaba de una manera especial, todos los animales se congregaron en torno a aquello que se había convertido en una ADVERTENCIA PARA LOS ATREVIDOS. De pronto quedaron atónitos.
Aquella concha dura comenzó a quebrarse y con asombro vieron unos ojos y una antena que no podía ser la de la oruga que creían muerta.
Poco a poco, como para darles tiempo de reponerse del impacto, fueron saliendo las hermosas alas arco iris de aquel impresionante ser que tenían frente a ellos: UNA MARIPOSA.
No hubo nada que decir, todos sabían lo que haría: se iría volando hasta la gran montaña y realizaría un sueño; el sueño por el que había vivido, por el que había muerto y por el que había vuelto a vivir.
"Todos se habían equivocado".
Dios no nos hubiera dado la posibilidad de soñar, si no nos hubiera dado la oportunidad de hacer realidad nuestros sueños.
Josué 1: 9
Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque El Señor tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.
Hay un sitio web que afirma predecir cuándo vas a morir. Después de contestar una serie de preguntas, aparece la fecha proyectada de tu muerte junto con un reloj digital que cuenta regresivamente la cantidad de segundos que te quedan por vivir.
Todo se basa en las estadísticas de la esperanza de vida, pero verlo en una pantalla de computadora lo hace más vivo. Como dice el sitio, es el amigable recordatorio de la Internet de que la vida se escapa.
Dios en su sabiduría no nos dice el día en que vamos a morir. Tampoco sabemos el día de regreso de Cristo.
Sin embargo, la Biblia nos apremia a vivir para Cristo y a estar preparados para ambos acontecimientos.
Pedro escribió: Más el fin de todas las cosas se acerca; sed pues prudentes y de espíritu sobrio para la oración. ...sed fervientes en vuestro amor los unos por los otros... Sed hospitalarios los unos para con los otros, sin murmuraciones. Según cada uno ha recibido un don especial, úselo sirviéndoos los unos a los otros como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios. 1 Pedro 4:7-10
Jesús dijo: Vosotros también estad preparados, porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no esperéis. Dichoso aquel siervo a quien, cuando su señor venga, lo encuentre haciendo así. Lucas 12:40, 43
Los cristianos no tenemos que asustarnos al ver que nuestro tiempo se escapa. Más bien vivamos cada momento para Cristo y estemos preparados para encontrarnos con Él hoy.
Prepárate para último momento preparándote a cada momento.