PONER FLECHITA DE IR ARRIBA EN EL FINAL DE TU BLOG

miércoles, 11 de marzo de 2009

Se trata de ponerle al blog una flechita para subir rápido. Herramienta por demás útil si tenemos un blog largo.

Esto lo vas a ver de diferente forma de acuerdo al navegador que se use.Con Firefox se ubica al costado del blog y se ve permanentemente abajo a la derecha, pero con el Explorer queda fijo abajo del todo.

Manos a la obra:Entra a tu plantilla y busca (está abajo de todo) y justo arriba pega lo siguiente:
'irSi queres buscar flechas varias entra aca (busca uparrow)Buena suerte!

¡Levántalo!

Cuando Colin Powell era un joven oficial de infantería, sirvió en Frankfurt, Alemania. Un día su pelotón fue asignado para custidiar un cañón atómico de 280 milímetros. Powell alertó a sus hombres, cargó su pistola calibre 45 y saltó dentro de su jeep. Después de un pequeño recorrido, se percató que ya no tenía su pistola 45. Sabiendo muy bien que la pérdida de un arma era considerada un asunto serio, llamó de mala gana por radio a su capitán Tom Miller.Cuando Powell regresó, el capitán Miller le dijo: "Tengo algo para usted", y le entregó a Powell su pistola. Le dijo: "Algunos niños del barrio la encontraron donde se le cayó de su cartuchera". Powell sintió un escalofrío. ¿La habían encontrado niños? "Sí"; continuó Miller, por suerte solamente dieron una vuelta antes de oír nosotros el tiro y quitarles la pistola. Miller concluyó: "Por el amor de Dios, hijo, no permitas que esto ocurra otra vez".Powell revisó más tarde su pistola y comprobó que no había sido disparada. La había perdido dentro de su tienda de campaña. Miller había urdido esa historia para darle un susto.Powell concluyó su relato: "Su ejemplo de liderazgo inteligente no se perdió en mí. Nadie llegó jamás a la cima sin resbalar. Cuando alguien tropieza, no creo que hay que pisarlo fuerte. Mi filosofía es: Levántalo, sacúdele el polvo y ponlo nuevamente en carrera".El hombre que no se equivoca,generalmente no hace nada.Salmo 37:24Cuando caiga, no quedará derribado, porque el Señor sostiene su mano.